jueves, septiembre 11, 2008

APOLOGIA DE ANGEL CASTRO, PADRE DE FIDEL CASTRO

Apología de Ángel Castro


Por Tania Díaz Castro

LA HABANA, Cuba, septiembre (www.cubanet.org) - Katiuska Blanco Castiñeira (1964) es una escritora cubana muy elogiada por Fidel Castro. Fue corresponsal de guerra en Angola y especialista del Ministerio de Relaciones Exteriores. Escribió también Todo el tiempo de los cedros, la historia familiar del máximo líder.

(Ángel Castro Argis )

La editora Abril publicó recientemente la obra de Katiuska Blanco, Ángel, la raíz gallega de Fidel. Aunque se trata de una apasionada apología, entre líneas puede conocerse mucho más acerca de las vidas turbulentas de esta familia.

Ángel Castro Argis nació en Galicia en 1875. Luego de incorporarse al servicio militar viajó a Cuba donde combatió contra la independencia de la Isla. Terminada la guerra regresó a España, y volvió pronto a la Cuba para establecerse en Camajuaní, Las Villas, donde un pariente lo ayudó a encaminar sus pasos.

Ángel, en poco tiempo, salió adelante, en medio de una pujante economía, gracias a su inteligencia y la próspera economía de la época. Más temprano que tarde dejó de ser un campesino pobre y se hizo de once mil hectáreas en Birán, en el oriente de la Isla, adonde se había trasladado. Allí cultivo caña, crió ganado vacuno de primera, compró bosques de árboles maderables, una tienda de víveres, un tranvía, un automóvil, una gallera donde se lidiaba los domingos y una amplia casa de dos pisos para la familia.

Katiuska retrata a Ángel Castro como un magnánimo terrateniente asociado a la United Fruit, querido por sus mil trabajadores, a quienes les brindaba choza segura y comida a buen precio.

Apartándonos de cómo se hizo de sus tierras, y olvidando lo que escribió José Martí: “Un hombre pobre no tiene tiempo para enriquecerse”, creo que Ángel Castro fue un hombre positivo. Contribuyó al auge de la nación cubana. Como él hay muchos cubanos en el exilio. Es un ejemplo de lo que puede lograr un hombre emprendedor en una sociedad libre y democrática. Murió a los 81 años mientras dos de sus hijos se disponían a zarpar en el Granma desde México con un grupo de hombres para iniciar una guerra de guerrillas contra el dictador Fulgencio Batista.

Cuentan que su viuda pidió en varias ocasiones a los rebeldes que no quemaran sus cañaverales. No imaginaba Lina Ruz que sus hijos correrían las cercas de sus fincas hacia los cuatro puntos cardinales del archipiélago cubano.

Mis tías maternas, ya fallecidas, contaban que Juan Castro, el padre, fue el pariente que ayudó a Ángel en Camajuaní. Mi abuelo había desertado del ejército español y luchó junto a los mambises hasta finalizada la guerra. Más tarde perdió su pequeña finca en un juego de naipes. Durante muchos años su viuda e hijos cobraban aquellas míseras pensiones de veteranos. Es una extraña e indescifrable historia a la que nunca le he dado la mayor importancia.

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VIDEO DONDE SE OYE QUIEN ERA VERDADERAMENTE ANGEL CASTRO